La tensión política en Argentina se intensifica a medida que se acerca una posible decisión de la Corte Suprema sobre la situación judicial de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Varios gremios han anunciado que podrían llevar a cabo un paro nacional si el máximo tribunal confirma la condena en su contra, generando un clima de incertidumbre y polarización en el país.
Reuniones de Urgencia y Estado de Alerta
En el Instituto Patria y la sede del Partido Justicialista (PJ) se han llevado a cabo reuniones de emergencia con legisladores, intendentes, gremialistas y otros referentes sociales para analizar la situación y coordinar una respuesta. El kirchnerismo se ha declarado en "estado de alerta y movilización" ante la posibilidad de que la Corte Suprema la inhabilite para presentarse a futuras elecciones.
Desde el entorno de CFK se advierte que una confirmación de la condena podría significar "el fin de la democracia como la conocimos desde 1983", equiparando la situación a las proscripciones sufridas por el peronismo en el pasado. Se argumenta que el problema no es solo la situación personal de Cristina, sino una amenaza al sistema democrático en su conjunto.
Amenaza de Paro Nacional
Sindicatos como la UOM (metalúrgicos), SMATA (mecánicos) y ATE Capital (estatales porteños) han expresado su disposición a realizar un paro de actividades en caso de que la Corte confirme la condena. Estos sectores denuncian una persecución política contra la ex mandataria y advierten sobre las consecuencias que esto podría tener para la estabilidad del país. Otros gremios, como trabajadores de ANSES y universitarios también se sumarían a la medida de fuerza.
El secretario general de la UOM, Abel Furlan, afirmó que se suma al paro en rechazo a la proscripción y la persecución política de Cristina, marcando una postura firme de parte del sindicato.
El Rol de la CGT
Si bien la CGT (Confederación General del Trabajo) aún no ha emitido una declaración oficial, la situación judicial de Cristina Kirchner genera tensiones internas. La relación entre la central obrera y la ex presidenta no estaría en su mejor momento, aunque la posibilidad de un fallo adverso podría unificar a diferentes sectores en defensa de lo que consideran una amenaza a la democracia.
El panorama político se presenta incierto, con la posibilidad de movilizaciones masivas y medidas de fuerza que podrían afectar la actividad económica y social del país. La decisión de la Corte Suprema será determinante para el futuro político de Cristina Fernández de Kirchner y para la estabilidad del sistema democrático argentino.