El noveno vuelo de prueba de la Starship de SpaceX terminó en fracaso luego de la pérdida del booster, a pesar de haber alcanzado el espacio. Este ambicioso proyecto, crucial para los planes de Elon Musk de colonizar Marte, sufrió un revés aunque la empresa destaca la valiosa información recopilada.
Noveno Intento de Starship: Un Vuelo con Desafíos
El lanzamiento, realizado desde la base Starbase de SpaceX en Texas, tenía como objetivo desplegar satélites simuladores Starlink y probar el sistema de reentrada del vehículo con modificaciones en el escudo térmico. Si bien el lanzamiento inicial y el ascenso fueron exitosos, la nave espacial comenzó a girar sin control debido a una fuga en el sistema de combustible. Esto impidió la correcta evaluación del escudo térmico.
Elon Musk, CEO de SpaceX, comentó en X (antes Twitter) que la Starship alcanzó el punto programado de corte del motor de la nave, lo que representa una mejora con respecto al vuelo anterior. Sin embargo, poco después de alcanzar el espacio, el booster, fundamental para la reentrada de la nave, se perdió durante su regreso a la atmósfera. Además, la puerta de carga útil no se abrió durante el vuelo.
¿Qué Sigue para Starship?
Los restos de la nave que no se desintegraron debido al calor de la reentrada, cayeron en el Océano Índico, según informó la compañía. Este es un nuevo contratiempo para el programa Starship de SpaceX, que ya ha enfrentado desafíos en pruebas anteriores. SpaceX ha experimentado problemas con el sistema Starship, incluyendo un vuelo abortado a principios de este año.
A pesar de los contratiempos, SpaceX enfatiza la importancia del aprendizaje continuo en el desarrollo de tecnología espacial de vanguardia. Dan Huot, del equipo de comunicaciones de SpaceX, afirmó durante la transmisión web del vuelo: "Estamos intentando hacer algo que es increíblemente difícil". Musk anticipa que los próximos tres lanzamientos de prueba de Starship podrían realizarse cada tres o cuatro semanas.
Starship, el cohete más grande y poderoso jamás construido, está diseñado para ayudar a la humanidad a establecerse en la Luna y Marte. El vehículo consta de dos etapas: un booster gigante llamado Super Heavy y una nave espacial de etapa superior de 52 metros de altura conocida como Starship, ambos diseñados para ser totalmente y rápidamente reutilizables, y ambos propulsados por el nuevo motor Raptor de SpaceX.