El procesamiento de cinco investigadores de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC) por presunto uso indebido de instalaciones ha generado fuertes repercusiones en la comunidad científica y académica. El juez Carlos Ochoa imputó a los investigadores por peculado, administración infiel y defraudación, en un caso que ha llamado la atención dentro y fuera de la institución.
Reacciones del Decano de Ciencias Exactas
Germán Barros, decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales, expresó su preocupación por la situación. En declaraciones a Telediario, Barros admitió que este proceso judicial representa un desafío para la vida académica de la universidad. Informó que se ha procedido a la suspensión preventiva de los investigadores involucrados, mientras se avanza en el esclarecimiento de los hechos.
Medidas Administrativas Adoptadas
El decano aclaró que la UNRC inició sumarios internos al tomar conocimiento de las irregularidades, pero subrayó las limitaciones de la universidad para llevar a cabo investigaciones exhaustivas. “De ninguna manera podemos, como la Justicia, hacer investigaciones profundas. No contamos con las pruebas que han sido aportadas, ni tenemos acceso a la causa”, explicó Barros.
A pesar de estas limitaciones, Barros enfatizó el compromiso de la UNRC con la transparencia y la colaboración con la justicia. “Se aportó toda la información que la Justicia requirió para aclarar los hechos. Estas irregularidades, si ocurrieron dentro del marco de la institución, por supuesto que nos hemos puesto a disposición para aportar todo lo que el juez nos ha solicitado”, afirmó.
Colaboración con la Justicia
La universidad ha puesto a disposición del juzgado toda la información necesaria para colaborar en el esclarecimiento del caso. Barros describió el momento como “una situación bastante dura”, pero transmitió tranquilidad respecto al rol de la Universidad en el proceso judicial. La investigadora que denunció las irregularidades continúa trabajando con normalidad.